Asoma en la política la punta de un iceberg evangélico
El Diputado Provincial Walter Ghione reunió a más de 5 mil fieles y pastores en el salón Metropolitano y los instó a votar a Juntos por el Cambio
En la jornada, se sostuvo la necesidad de la participación de la iglesia cristiana en las políticas públicas y para ello se remarcó la importancia de “tener embajadores del Reino que levanten los verdaderos valores y principios cristianos en todos los lugares de toma de decisión”.
El líder del partido político UNO (Una Nueva Oportunidad) informó que “el espacio viene creciendo de forma sostenida en toda la provincia y el país”, y que incluso “hay conversaciones con varios cristianos evangélicos que son reconocidos empresarios y figuras de trascendencia pública interesados en participar y ser candidatos el año que viene”.
Los evangélicos crecieron como fuerza religiosa en Latinoamérica en las últimas décadas. Por su parte, en Argentina pasaron de representar el 9% al 15,3% según datos arrojados en las investigaciones del Conicet, y esto se ve reflejado proporcionalmente en cada provincia, “por eso es natural que cada población busque representación política en algún hermano de Fe”, sostuvo.
Varios estudios de investigación arrojaron que “Hay una notoria y demostrada influencia de la iglesia evangélica en la gente más pobre a la hora de realizar el voto. Esta situación se da con mayor importancia en los miles de templos de zonas vulnerables, donde los fieles le consultan al pastor sobre a quién votar en cada elecciones“.
Una mirada de santa fe
Ghione, (quien no descartó ser candidato a Gobernador en 2023), repasó sobre las necesidades y demandas insatisfechas en la provincia y apuntó a la falta de valores. “Fomentan la cultura del descarte, la ilegalidad y la corrupción” disparó al tiempo que propuso, adelantando un posible eslogan: “Necesitamos una mirada de Fe”.
“Llamados a legislar y gobernar”
En los tramos finales de su discurso, el Diputado de Santa Fe manifestó la finalidad de posicionar “hermanos cristianos” en lugares de poder. Y se dijo al auditorio: “¡No dudamos! Dios va a gobernar el rumbo del país, de la provincia; y de cada una de nuestras ciudades, porque suyo es el Reino. Pero hoy nos necesita como su vehículo para la transformación: ¡Porque somos el pueblo de Dios!