Buscan poner un tope de 4 por ciento para los aumentos
Acuerdo de precios. Reactivaron las negociaciones entre las empresas y los funcionarios de la Secretaría de Comercio. ¿Canasta de artículos con valores congelados por 4 meses?
Cuando los anuncios de acuerdos y congelamiento de precios parecían estancados, el Gobierno reactivó en la última semana las negociaciones con las empresas del sector de consumo masivo -alimentos, bebidas, higiene personal y limpieza- para acordar una suba de precios para todos los productos de hasta 4% mensual para los próximos meses. Al mismo tiempo, sigue buscando conformar una canasta con precios congelados de diciembre a marzo.
Según fuentes cercanas a las negociaciones, la propuesta ahora es acordar precios con subas por debajo del 4% mensual por cuatro meses, lo que cambia el panorama con respecto al plan original.
Por otro lado, no se desactivó la idea de una canasta con precios congelados de unos 1.500 o más productos, que llevaría el nombre de Precios Justos y que incluiría los cerca de 500 artículos que ya están dentro de Precios Cuidados pero sumaría más de rubros como higiene y cuidado personal, entre otros.
“La situación cambia totalmente. Podemos acompañar pero el tema de los costos es muy importante y congelar todo por cuatro meses tiene un impacto negativo que no vamos a poder cubrir. Por ahora está todo muy confuso. No es lo mismo acordar una canasta con productos esenciales que incluir otros productos más premium o que son para otras ocasiones de consumo, más indulgentes que básicas”, señalaron desde una alimenticia.
“Nos piden congelar, pero deberían pedirle lo mismo a nuestra cadena de valor, proveedores de insumos, precios de combustibles. No es solo el precio de venta, luego están también el margen que ponen los mayoristas y supermercados”, dijo otra fuente de la industria, que aseguró que están en una etapa de diálogo y aun no se llegó a un acuerdo concreto.
Los funcionarios de Comercio habían adelantado que luego de los cuatro meses de congelamiento se autorizará una suba de 4% (después de marzo de 2023).
La semana próxima seguirán las reuniones entre las empresas y la Secretaría de Comercio. Según trascendió, la posibilidad de flexibilizar el acceso a divisas para importar insumos productivos necesarios para el funcionamiento de las fábricas forma parte de las negociaciones.
De esta forma, las compañías que tengan que importar podrían obtener algún adelanto de divisas para mejorar su planificación de disponibilidad de insumos y volumen para el año que viene.
Para los economistas, los acuerdos de precios siempre son soluciones de muy coto plazo. “El problema es macro, no es micro. Por eso, estas medidas son placebos que se toman. Para frenar la inflación en un contexto donde todos los precios están corriendo al 6% esto es una bandita que cura la herida por un momento, pero no te va a curar de los problemas cuando hay un desalineamiento de precios relativos y de expectativas”, explicó Sebastián Menescaldi, de la consultora EcoGo.
La posibilidad de que los precios de los productos estén impresos en los envases, que se había adelantado hace un par de semanas no fue buen recibida por la industria que argumentó que su implementación era compleja y no podría resolverse rápidamente.
Código de barras
La opción ahora es que sean directamente los consumidores los que puedan acceder a través de una aplicación de lectura de código de barras al precio acordado para cada producto. Según adelantaron fuentes oficiales, esa aplicación se está desarrollando y está en proceso avanzado.
Un relevamiento de la consultora LCG arrojó para la primera semana de noviembre suba promedio de precios de los alimentos de 0,7%, se mantuvo constante el ritmo de la semana anterior. El índice de alimentos y bebidas relevado (que incluye unos 8.000 productos) presentó una inflación mensual de 7,1% promedio en las últimas 4 semanas y 5% punta a punta del mes.
La categorías de verduras y lácteos tuvieron una inflación mensual promedio de dos dígitos: 10,8% para las verduras y 10,1% para los lácteos. Detrás se ubicaron rubros como panificados, cereales y pastas (8,8%); frutas (8,6%); y condimentos (7,5%), entre otros.