Condenan a tres años de prisión al enfermero que robó 800 vacunas
El individuo y su pareja habrían sustraído 300 vacunas contra el coronavirus más 500 antigripales. El hecho ocurrió en Santiago del Estero
La jueza María Pía Danielsen, condenó ayer a un enfermero a tres años de prisión en suspenso y excarceló a su esposa, un año y siete meses después de que se descubriera la sustracción de vacunas contra el coronavirus y antigripales desde el Ministerio de Salud de la Provincia en plena pandemia.
En juicio abreviado, la magistrada condenó a Dante Daniel Díaz al hallarlo responsable de los delitos “hurto agravado”, “adulteración de sustancias medicinales”, “tráfico y suministro de sustancias medicinales” y “tenencia de arma de fuego de uso civil, todo en concurso real de delitos”, según el detalle suministrado por la fiscal Érika Leguizamón.
La investigación se originó por la denuncia de la Dra. Florencia Coronel, directora de Inmunizaciones del Ministerio de Salud de la Provincia el 17 de abril del 2021. En su presentación, la funcionaria reveló que descubrió el faltante de 300 dosis de vacunas contra el coronavirus (Sputnik V, Covishield y Sinopharm) y también 500 dosis antigripales.
Cámaras vitales en la causa
Merced al circuito interno de seguridad, rápido quedaron en el radar policial el enfermero, su pareja, María Angélica Coronel, y dos hombres más, todos empleados del Área de Inmunización del Ministerio. Ella trabajaba en el call center del Sease 107.
En el domicilio de la pareja, la policía secuestró casi la totalidad de las dosis robadas, un arma de fuego, más de $ 800.000, documentación relacionada con la causa y descubrió que Díaz y Coronel regenteaban un vacunatorio clandestino que funcionaba en el Bº 8 de Abril.
La misma tecnología desnudó que el “negocio” operó y habría sido financiado por selectos “clientes” que habrían efectivizado altas sumas de dinero, a cambio de ser vacunados en contra del Covid-19, ahondó en sus fundamentos ayer la fiscal.
En principio, el abogado defensor, Julio Llugdar, habría acudido a audiencia tras el cese de prisión del enfermero y el sobreseimiento para su esposa.
Una salida inmediata
De todos modos, luego acordó con la Fiscalía un juicio abreviado, cuyo requisito indispensable y particularidad es que todo imputado acepte su responsabilidad en el delito enrostrado. Así lo hizo Díaz, quien también aceptó el monto de la pena convenida y la calificativa legal.
En tanto, Llugdar bregó por el sobreseimiento de la mujer del enfermero, María Angélica Coronel, quien hasta ayer se encontraba con arresto domiciliario. Finalmente, Danielsen condenó a Díaz a tres años de prisión en suspenso y ordenó el secuestro del arma de fuego; a su vez, excarceló a Coronel, ya que la Fiscalía no habría formulado oposición, deslizaron los voceros judiciales.
Vacunatorio y secuestro de dosis al por mayor
El matrimonio trabajaba a la vez en un vacunatorio privado clandestino, donde vendía y aplicaba las dosis de inmunizantes. Se cree que tenía acceso al depósito oficial de vacunas contra el Covid-19. Ello le posibilitó acceder a las dosis destinadas a vacunar a la población de acuerdo con el orden establecido en aquellos meses.
Un rápido conteo permitió a las autoridades detectar el faltante de vacunas contra el coronavirus que se encontraban en el depósito oficial. La denuncia penal recayó en la División de Homicidios y Delitos Complejos de la Policía. Así, fue allanado un domicilio en Necochea al 600 del Bº 8 de Abril. Allí cayó preso Díaz, con residencia en el Bº San Germés.
En su casa fueron secuestradas 268 dosis de vacunas Sputnik V, 14 de Sinopharm, 1 dosis de vacuna Covishield, todas contra el coronavirus. El golpe incluyó el secuestro de 510 dosis de diferentes vacunas que no serían contra el Sars Cov 2; también, elementos informáticos, un revólver, insumos de enfermería, como materiales descartables, jeringas, agujas, guantes, barbijos, bolsas de residuos patógenos, libretas sanitarias de vacunación del Covid-19 en gran cantidad, cremas, cánulas de oxígeno y documentaciones varias.