Un gendarme murió apuñalado y baleado en una chacra ubicada en la localidad correntina de Alvear. Los investigadores analizan la hipótesis de que el crimen haya sido un ataque mafioso, vinculado a las carreras de caballos y las apuestas clandestinas.
La víctima, identificada como Jorge Orlando Burquet de 40 años, era sargento de la fuerza federal desde 2013. Había nacido en Formosa y prestaba servicio en la Sección Alvear -dependiente del Escuadrón Nº 57-, aunque actualmente estaba de licencia por un cuadro de depresión.
El hecho ocurrió en la noche del sábado en el establo que la víctima alquilaba para sus caballos de carrera, sobre la calle Venezuela, cercana al Club Hípico.
El gendarme fue secuestrado, maniatado, torturado y apuñalado en el abdomen y en el brazo. Aunque fue trasladado de urgencia al hospital local y luego derivado al de Santo Tomé, murió por la gravedad de sus heridas.
El fiscal de Santo Tomé a cargo de la causa, Facundo Cabral, detalló en declaraciones a Radio Dos que Burquet fue atacado por tres personas que estaban encapuchadas. En ese contexto, aseguró que “es un crimen con ribetes mafiosos”.
Antes de morir, el hombre alcanzó a nombrar a uno de los involucrados de la agresión frente a sus compañeros que habían ido a rescatarlo.
Un testigo del ataque fue quien alertó al personal de Gendarmería de lo que había sucedido. Sin embargo, los agresores ya se habían dado a la fuga cuando el personal llegó al lugar.
Según confirmó el fiscal Cabral, el sospechoso ya fue detenido y también estaría relacionado con los caballos de carrera. En ese sentido, investigan si el motivo del crimen está relacionado a ciertas deudas pendientes con la víctima.
“Tenía una herida en el bazo, una puñalada y un disparo en una mano”, precisó el funcionario judicial sobre las pericias preliminares.
En los procedimientos secuestraron proyectiles de armas de fuego y escopetas. Además, señalaron que uno de los que intervino en el crimen sería de nacionalidad brasileña.