El Presidente volvió a cuestionar al gobernador de Córdoba: “Que resuelva sus problemas en el psicólogo”
Javier Milei dijo que no tiene previsto pedirle disculpas a Martín Llaryora luego de considerarlo un traidor por el freno a la Ley Ómnibus
El presidente Javier Milei protagonizó este jueves un nuevo round en su enfrentamiento con el gobernador de Córdoba, Martín Llaryora, quien había dicho que esperaba una disculpa del jefe de Estado por tratarlo como “traidor” en el marco del freno a la Ley Ómnibus. “Yo no tengo que pedirle disculpas por nada, si él se autoadjudica la frase, es un problema de él”, contestó en un reportaje concedido al periodista Gustavo López en radio La Red.
Y embistió: “No estoy en política para resolver problemas psicológicos, que los resuelva en el psicólogo”.
A partir del rechazo de los diputados cordobeses a las reformas que impulsaba el Gobierno en el Congreso, se inició una etapa de tensión entre la Casa Rosada y el gobierno de Córdoba. Esa pelea incluyó la decisión del Presidente de echar de la Anses a Osvaldo Giordano, un dirigente que fue funcionario de Juan Schiaretti y cuya esposa votó en contra de la ley en Diputados.
En el reportaje concedido esta mañana, Milei reconoció que la salida de Giordano de la administración pública está vinculada a su enojo con Córdoba y al voto de su mujer, la legisladora nacional Alejandra Torres.
“¿Acaso la mujer de Giordano no votó en contra de la ley? Está durmiendo con el enemigo, está durmiendo con un traidor”, describió el jefe de Estado.
En ese contexto, volvió a embestir contra los gobernadores que se quejan por los recortes en las transferencias discrecionales y destinan fondos públicos a financiar espectáculos culturales. “Que dejen de hacer recitales a beneficio y básicamente les paguen a los docentes”, ejemplificó.
“En vez de contratar artistas para hacer publicidad política y atacar a espacios de distintas ideas, que se dediquen a hacer política seria. Está lleno de artistas que cobran del Estado en distintas provincias y el Cosquín Rock es un caso más”, analizó.