¿Funes, jardín de la provincia o Edén de los negociados? Se confirmó la reunión narco en barrio privado
La administración del barrio privado Aguadas confirmó que “es cierto que distintas personas que a la fecha están prohibidas de su libertad estuvieron en el barrio”. Habría habido otra reunión en una quinta de la ciudad. Todo se dio en el marco de la organización del operativo para traficar 3 mil kilos de cocaína desde el puerto de Rosario
Una información conocida la semana pasada sacudió el escenario político y policial de la ciudad. El periodista Germán de los Santos publicó en su cuenta de Twitter que el 24 de julio pasado hubo “una reunión cumbre de narcos” en un country de la ciudad, en la que “el colombiano Antonio Ramírez Duque dio las últimas directivas a dos bonaerenses que hacían la logística de más de 3000 kg de cocaína que iban a salir por el puerto de Rosario”.
La información se enmarca en la causa nacida a partir del descubrimiento de un cargamento de alrededor de 1658 kilos de cocaína de máxima pureza en un galpón del barrio rosarino de Empalme Graneros, escondidos en bolsas de alimento balanceado a base de maíz que iban a ser exportadas a través del Puerto de Rosario a Dubai vía España. Se cree que el cargamento era de alrededor de 3000 kilos, a partir de indicios que surgieron de otros dos decomisos, uno en el puerto de Santos (Brasil) y otro en Rotterdam (Países Bajos), donde se encontraron 568 y 866 kilos de cocaína respectivamente en cargamentos que tenían como puerto de partida el de Rosario. Además, tanto la cocaína encontrada en Empalme Graneros como en Brasil y Países Bajos tenía el mismo sello de la marca Louis Vuitton. Se calcula que la totalidad del cargamento estaba valuado en más de 150 millones de dólares.
El dato generó un áspero cruce político. El concejal de JxC Nacho Rímini disparó en sus redes citando el tuit de de los Santos y agregando que “no queremos que Funes sea la casa de los narcos, y para eso necesitamos una intendencia a la que le importe más la ciudad que los negociados”, apuntando directamente al intendente Santacroce y poniendo bajo la lupa las inversiones que llegan a la ciudad: “Funes se transformó en un polo atractivo para las inversiones en los últimos años y eso lo celebramos, pero el Municipio no hace nada para asegurarse que esos fondos que llegan a la ciudad sean legítimos, entre los empresarios honestos que apuestan por la ciudad y buscan su lógica ganancia se camuflan algunos delincuentes que terminan generando estas situaciones que hay que atacar a tiempo”.
El mandamás municipal respondió en una historia de instagram: «Ante los dichos desafortunados expresados por el concejal Rímini, me solidarizo con todos los vecinos y autoridades del barrio privado Aguadas, a quienes conozco personalmente y aprecio mucho. Son gente de trabajo y de bien, que no se merecen este escrache sin sentido, producto de un chico inexperto que nos tiene acostumbrados a estos papelones. Lamento que gente así ocupe bancas en la política y perjudique a quienes sí trabajamos y estamos preparados para esto. Hechos, no palabras».
Rímini recogió el guante en un comunicado en el que volvió a apuntar al intendente: “dijimos que no queremos que Funes sea la casa de los narcos y Santacroce nos dijo que son dichos desafortunados”. El edil radical, además, insistió con sus críticas: “el Municipio está muy enfocado en los negocios y no está atento a la realidad, el problema no es un barrio, ni una ciudad, ni los vecinos que están igual de preocupados que yo por este tema. Es un problema que azota con fuerza en toda la región, es hora de poner manos a la obra”.
Cuando el tema parecía que amainaba, un comunicado interno de la administración del barrio cerrado a sus vecinos se filtró y confirmó que la reunión existió: “Luego de los hechos de público conocimiento mencionados por el periodista German de los Santos y el concejal Rímini, queremos informarles que se estuvo investigando para poder llegar a tener real referencia de lo sucedido y se encontró que es cierto que distintas personas que a la fecha están prohibidas de su libertad estuvieron en el barrio los días 17, 21 y 22 de junio en una unidad que estuvo alquilada hasta el 30 de junio. Informamos que la unidad mencionada estaba alquilada bajo contrato y fue devuelta al finalizar el mismo en la fecha mencionada anteriormente”.
A la confirmación de la existencia de la reunión se sumó otro dato más, informado otra vez por de los Santos en el medio “Aire de Santa Fe”. Allí, el periodista reveló que en la causa judicial figura otra reunión que tuvo lugar en Funes entre los protagonistas pero en otro inmueble ubicado en calle Tandil al 2400, una casaquinta con pileta que también habían alquilado temporariamente. Los investigadores, según informó de los Santos, sospechan que Funes era elegida por los narcos para sus reuniones porque les permitía mantener un bajo perfil en las gestiones, ya que los registros son “menos rigurosos” que en un hotel.
De las reuniones habrían participado José “Tano” Sofía y Gabriel Nicolau, dos pesos pesados del hampa en el oeste del conurbano bonaerense, Marco Páez, quien fue el encargado de alquilar en forma temporaria la casa en el lote 183 del mencionado barrio privado, y el colombiano Antonio Ramírez Duque, el representante del cártel dueño del cargamento, cuyos referentes eran otros dos colombianos: Newson Cheung Sabogal y Gabriel Londoño Rojas, según informó de los Santos.