Gendarme fue emboscado y asesinado de un balazo por la espalda cuando circulaba en su moto
El sangriento hecho se registró en Zárate, Buenos Aires. El cabo Andrés Claudio Rivero fue atacado cuando se dirigía a su puesto de trabajo
Un gendarme fue asesinado de un disparo en la espalda cuando viajaba en una moto en la localidad bonaerense de Zárate y los investigadores sospechan que el crimen está relacionado a una tentativa de robo, informaron fuentes policiales y judiciales.
El hecho se registró pasadas las 6, cuando personal policial arribó a la intersección de la calle España y ruta 9 en la mencionada localidad del norte del Gran Buenos Aires. En ese lugar, los agentes se encontraron con una persona que había caído de su moto KTM 500 y se encontraba inconsciente, señalaron los voceros. Al arribar la ambulancia, los médicos constataron que el hombre estaba fallecido y que tenía un disparo en el omóplato izquierdo.
Según las fuentes, la víctima fue identificada como Andrés Claudio Rivero, quien era cabo primero de la Gendarmería Nacional (GNA) y prestaba servicio en el Escuadrón 7 Seguridad Ciudadana de El Palomar, a donde se dirigía esta mañana antes de ser asesinado.
Por su parte, los pesquisas indicaron en la escena del crimen se halló una vaina servida calibre 22. Además, aseguraron que Rivero no registraba ningún faltante entre sus pertenencias ya que se encontró su bolso en el lugar, donde tenía su arma reglamentaria y dos cargadores.
En ese contexto, fuentes judiciales aseguraron a Télam que la principal hipótesis es que el crimen tuvo lugar durante un intento de robo, en el cual los delincuentes, al percatarse que estaban asaltando a un gendarme, abrieron fuego contra él. ”Todavía estaba oscuro y los ladrones no pudieron ver que estaban robándole a un personal de la GNA. Luego de dispararle, no llegaron a robarle la moto y huyeron”, explicó a Télam un vocero con acceso a la investigación.
Al respecto de la víctima, las fuentes contaron que “estaba viviendo en un barrio privado a pocos metros del lugar del hecho” junto a su hermana y su cuñada, quienes también son gendarmes.Interviene en la investigación la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) de Exaltación de la Cruz, a cargo del fiscal Juan Manuel Esperante.
El antecedente de un jefe de escuadrón asesinado
En junio de 2020 se registró también en Zárate el asesinato de un gendarme. En ese caso fue el propio jefe del escuadrón quién cayó bajo las balas de delincuentes. No es habitual la muerte de gendarmes en enfrentamientos con ladrones. En Zárate se registraron así dos casos en menos de tres años. En 200, el comandante Marco Antonio Castillo fue interceptado por delincuentes anteanoche, pasadas las 21, cuando se movilizaba en bicicleta por el centro de la ciudad de Zárate. Había dejado el escuadrón pocos minutos antes y estaba por llegar al lugar donde vivía cuando fue sorprendido por los agresores en la calle Independencia al 800.
Castillo había asumido en enero pasado el mando de esa unidad luego de trabajar durante tres años como segundo jefe del Destacamento de Prevención Barrial, que está desplegado en la villa 1-11-14.
No hay antecedentes de asesinatos de oficiales de la Gendarmería de ese rango y en actividad en los últimos 30 años.
Castillo vivía en una habitación alquilada al viceconsulado español en Zárate, ya que pasaba la mayor parte del tiempo en el escuadrón y los fines de semana acostumbraba visitar a su familia en Ezeiza. Estaba por ingresar en su vivienda cuando fue atacado. Recibió dos disparos en la cabeza y los peritos encontraron en el lugar otra vaina percutada por los agresores. Trascendió que el comandante asesinado no portaba su pistola reglamentaria.
Castillo había egresado de la escuela de oficiales de la Gendarmería en 1995 y estuvo destinado en las misiones internacionales que la fuerza de seguridad federal sostenía en Haití, Congo y Kosovo.