La CGT reclamó a Alberto Fernández que instale el busto de Isabel Perón en la Casa Rosada

Los jefes de la central obrera plantearon en una carta que la instauración sería un “acto de estricta justicia” hacia una mujer tratada como “paria en su propia tierra”

Un día después del aniversario del Golpe de Estado del 76 y de la conmemoración del Día de la Memoria, la Confederación General del Trabajo (CGT) le solicitó al presidente Alberto Fernández la colocación del busto de María Estela Martínez de Perón en el “hall de honor” de la Casa Rosada junto a las figuras del resto de los mandatarios constitucionales argentinos. Se trata de un pedido de larga data, que transitó por distintos vaivenes en la historia reciente, y que involucra a una pieza de mármol de carrara que llegó a estar perdida durante años.

En una carta fechada el 25 de marzo, la central obrera reclamó al jefe de Estado que instale la figura conmemorativa de la entonces presidenta de la Nación destituida por el golpe de Estado cívico-militar de 1976 con el objetivo de “contribuir a la verdad y justicia de quien ha sido y continúa siendo objeto de oprobio, indiferencia y mutismo”.

El texto lleva las firmas del triunvirato que ejerce la conducción de la CGT (Héctor Daer, Carlos Acuña y Pablo Moyano) junto a los secretarios generales de UPCN, Andrés Rodríguez, y el secretario de Derechos Humanos de la entidad sindical y titular de la Unión de Empleados Judiciales de la Nación (UEJN), Julio Piumato.

“Isabel Perón ‘Isabelita’ primera mujer en el mundo en ocupar la presidencia, que el pasado 4 de febrero cumpliera 91 años, es una paria en su propia tierra, en tanto pesa sobre ella la iniquidad de la proscripción -maquillada de causa judicial- que la obliga al exilio. Debemos tener el valor de efectivizar un acto de Justicia por Isabel Perón en el atardecer de su vida”, señalaron los dirigentes sindicales en la carta con destino a Alberto Fernández.

La CGT fundamentó su reclamo de colocar la imagen de “Isabelita” en la Galería de los bustos presidenciales de la Casa Rosada como parte de una “recuperación de la memoria histórica de nuestra patria” y señalaron que corresponde hacerlo por “quienes en los momentos más cruentos que como país debimos atravesar, dieron todo -hasta la vida- por construir una Argentina socialmente justa, económicamente libre y políticamente soberana: los trabajadores”.

“Una nación no puede ser digna de llamarse República, cuando sus hijos padecen exilio por causas judiciales politizadas, fundadas en argumentos esgrimidos por la propia dictadura militar, atentando contra la Memoria, Verdad y Justicia que todos los 24 de marzo decimos reivindicar”, apuntó Julio Piumato en el escrito.