Pelea interna de la UOCRA terminó con dos heridos de bala durante una olla popular
Dos personas resultaron gravemente heridas en Ensenada durante un tiroteo desatado entre dos facciones de la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (UOCRA).
Las víctimas son una mujer, identificada como Tamara Medina, de 38 años, quien recibió un tiro por la espalda y cuyo estado es el más delicado, y Tobías Quevedo, de 20 años, que tiene una herida de bala en el rostro.
[AHORA] Escala la violencia en la UOCRA: nuevo enfrentamiento entre las facciones del "Pata" Medina y del líder de la barra de Estudiantes, Iván Tobar. https://t.co/CF9EgfzP10 pic.twitter.com/yiCjpcACz6
— ElCanciller.com (@elcancillercom) April 13, 2024
De acuerdo con la reconstrucción que pudo hacer el medio local 0221, todo comenzó cerca de las 18:15 del viernes en las calles Güemes y Márquez de Avilés, Ensenada. Momentos antes, se habría llevado a cabo una olla popular, organizada por el sector que responde a Iván Tobar. La gran interna dentro de la UOCRA se da por la disputa que existe entre este sector y la familia del Juan Pablo “Pata” Medina.
En ese sentido, las cosas transcurrían con normalidad hasta que un grupo, que se cree pertenece a la facción de los Medina, llegó al lugar y los increpó. De esta manera, las personas comenzaron a dispersarse. La tensión escaló y, en circunstancias que aún se desconocen, se inició un tiroteo que dejó como resultado dos heridos, que fueron señalados como “dos que quedaron colgados”, es decir que no lograron huir a tiempo, según el medio El Día.
Todo quedó registrado en video. Las detonaciones alertaron a los vecinos, quienes dieron aviso inmediato a las autoridades. De esta manera, un móvil policial se hizo presente en el lugar al poco tiempo.
Una vez allí, los oficiales llegaron a observar una caravana de motos y vehículos que daban a la fuga. En simultáneo, divisaron también a las dos personas tendidas en el suelo con heridas de bala.
Ambos fueron trasladados para que reciban asistencia médica. Según el último parte, Quevedo presenta una lesión en el pómulo derecho, pero no perdió el conocimiento y respira por sí solo. En cambio, Medina, mujer que no tendría vinculación con la otra facción pese a su apellido, recibió un balazo en la zona central de la espalda, por lo que estudian si el proyectil perforó un pulmón.
Ahora, la Justicia investiga el caso en un intento de esclarecer las circunstancias en las que sucedió todo y quiénes serían los responsables.
Este no es el primer episodio violento que tiene como protagonistas a los Medina en esta semana, ya que el jueves 11 de abril por la madrugada ya habían sido noticia por un fuerte enfrentamiento entre los familiares del “Pata”, que fue acusado de formar parte de una asociación ilícita y lavado de activos, pero finalmente resultó sobreseído.
En esta oportunidad, la sede fue la casa del dirigente sindical en Punta Lara, donde se hizo presente un grupo de allegados a su nieto Braian. Estas personas arribaron al lugar de forma silenciosa y estuvieron acompañados por una comitiva de motos, tal como ocurrió en el ataque registrado el viernes.
El conflicto se desató al poco tiempo y otra de las protagonistas fue Fabiola García, la esposa de Medina, quien al ver la comitiva salió de su casa y se enfrentó con una mujer que portaba un palo en la mano. “Qué me decís cara rota”, la increpó García a la mujer mientras forcejeaban. Luego, le exigió que Braian y Cristian “Puly” Medina, otro hijo del dirigente sindical, se hicieran presentes en el lugar.
Lejos de terminar con el enfrentamiento, ambas mujeres continuaron con los gritos y las agresiones. “El único que tiene la autoridad moral es el Pata, no el falopero y borracho de Braian que nunca trabajó en una obra”, lanzó García. La situación alertó a los vecinos, quienes se comunicaron con la Policía, por lo que un patrullero se hizo presente en el lugar y los efectivos lograron controlar la situación antes de que pase a mayores.
Dos semanas antes, el nieto del sindicalista fue detenido por mantener una pelea a golpes con un hombre de apellido Velázquez en plena vía pública. Hasta donde se supo, intercambiaron insultos, descendieron de sus respectivos vehículos y se agredieron físicamente.