Un abogado ambientalista santafesino visitó al Papa en el Vaticano
Rafael Colombo, un abogado ambientalista de la ciudad de Santa Fe, fue recibido por el Papa en el Vaticano. En un encuentro que se extendió por 40 minutos, lo animó a “unir justicia social con justicia ecológica”
El abogado santafesino Rafael Colombo se reunió este viernes con el Papa Francisco. El encuentro se extendió por 40 minutos y tuvo lugar en la residencia papal de Casa Santa Marta, en el Vaticano. “Nos dijo que por favor sigamos luchando”, sostuvo, luego de plantearle la necesidad de “un pacto ecosocial del Sur, para pensar nosotros la salida a la crisis ambiental”.
Colombo estuvo acompañado por otro abogado ambientalista Enrique Viale. Ambos integrantes de la Alianza Global por los Derechos de la Naturaleza. “Visitamos al Papa para contarle del embate extractivista que está sufriendo toda América Latina”, planteó. Viale contó que “tuvimos el honor de mantener un apasionante intercambio sobre la problemática socioambiental en el mundo y, especialmente, en América Latina”.
Además, agregó que le contaron a Francisco que estaban en Italia con motivo del encuentro internacional de la Alianza Global por los Derechos de la Naturaleza (GARN), un espacio que reúne a más de 4000 organizaciones y activistas del planeta: “Los derechos de la naturaleza están muy presentes en Laudato Si, especialmente en el parágrafo 33. Allí, Francisco nos invita a recuperar el encantamiento de la creación, revisar el modelo económico productivo para finalizar con una propuesta de ecología integral emancipatoria” – agregó Colombo, quien además contó que le dejaron a Francisco una carta de GRAN firmada por su secretaria general, Natalia Greene.
“También le transmitimos acerca del recrudecimiento extractivista que está sufriendo toda América Latina y en particular Argentina. Hoy, como hace más de 500 años, capitales y corporaciones extranjeras sitúan a nuestro continente – otra vez – como el territorio de sacrificio, al servicio de la transición energética de los países del norte, perpetuando nuestro perfil de sociedades exportadores de naturaleza, para que Estados Unidos, la Unión Europea y China, tengan sus propios autos eléctricos”, dijo Viale. “Todo ello en un contexto atravesado por las consecuencias de la pandemia y la guerra con Ucrania, que han agravado la crisis energética y alimentaria mientras se acelera la crisis climática”, agregó.
Viale también comentó que la charla giró además en torno al “Pacto Ecosocial e Intercultural del Sur”, un espacio que reúne a organizaciones, activistas comunitarios y académicos del sur global que tiene por objetivo promover una transición Ecosocial desde abajo, por y para América Latina, África y Asia, articulando, amplificando y sistematizando experiencias locales sobre soberanía alimentaria, agroecología, energías comunitarias, ecofeminismos, entre otras luchas, con la convicción de no reproducir los Pactos Hegemónicos que exacerban las profundas asimetrías geopolíticas y las desigualdades Norte-Sur”.
En relación a Argentina, hicieron especial referencia “a lo que está sucediendo con los hidrocarburos y el fracking en Vaca Muerta, a la explotación petrolera offshore en el Mar Argentino, a la extracción de litio en las provincias del norte, al lobby del agronegocio, a la minería y a la especulación inmobiliaria contra la ley de humedales que hace 10 años es cajoneada en el Congreso de la Nación ”.
“Nos dijo que por favor sigamos luchando”, sostuvo Colombo, “nos animó a unir justicia ecológica con justicia social, una idea que en Laudato Si es expresada a partir de la relación que existe entre el clamor de la Tierra con el de los pobres”, agregó. Finalmente, regalaron a Francisco un ejemplar del libro El colapso ecológico ya llegó. Una brújula para salir del (mal)desarrollo, escrito por la reconocida socióloga Maristella Svampa y Enrique Viale.
Los abogados le contaron la situación ambiental regional y nacional, con especial referencia “a lo que está sucediendo, por ejemplo, con el petróleo, el litio y los humedales”. En cuanto a los humedales criticaron lo que denominaron como el “consenso de los commodities” a nivel regional. Asimismo advirtieron por un “recrudecimiento” de los procesos extractivistas en el continente y del “círculo vicioso” entre deuda ecológica y deuda financiera.